Un hombre conoció a una hermosa mujer y decidió casarse con ella.
Ella le dice:
- ¡Pero, no sabemos nada el uno del otro!
Y él responde:
- No es problema, nos iremos conociendo con el tiempo.
Ella accedió.
Se casaron y se fueron de luna de miel a un lujoso resort.
Una mañana, estaban tumbados junto a la piscina cuando él se levantó, subió a un trampolín de 10 metros, realizó una perfecta demostración, de todos los saltos que existen y luego volvió junto a su esposa.
Ella le dice: - ¡Ha sido increíble!
Y él responde:
- Fui campeón olímpico de saltos ornamentales.
Ya te dije que nos conoceríamos con el tiempo'.
En esto ella se levanta, entra en la piscina y empieza a nadar, ida y vuelta a una velocidad impresionante.
Después de 30 vueltas, sale del agua y se tumba junto al marido.
Él dice:
- ¡Estoy sorprendido! ¿Fuiste nadadora olímpica?
Y ella contesta:
- No. Puta en Venecia y atendía a domicilio...