NO LO DEJEN SOLO...

No lo dejen solo...



Por Enzo Peralta
La fecha del retorno de Gio está más o menos clara, no así el retorno del artista que demostró que pudo ser.
Gio volverá en agosto, que lo acompañe Moreno.

Imagino que es el anhelo de todos. Ya no importara el compromiso que deba asumir la institución para con los promedios, como se distribuya y en consecuencia el andar del Racing de Simeone en el rectángulo del Cilindro, tan esquivo el torneo anterior. Será efímero el todo, en el preciso instante en el que el fútbol argentino se rinda ante la dupla colombiana. Esa revolución futbolística que se espera a partir de la sociedad entre Gio y Teo apagara, por un momento (que sea por un momento), todas las luces de alarma.

Los relatores imaginamos esa jugada, creemos tenerla en la cabeza para que la condición de artistas de ambos no nos sorprendan y que las metáforas, aunque se preparen de antemano, reboten en los racinguistas de la forma mas natural y espontánea. Estarán aquellos plateístas o abonados que se frotan las manos en el frío invierno tachando los días para abrazar a ese compañero de la butaca siguiente que en la malaria permanente lo atesora. Ese abrazo de gozo, que hace tanto tiempo que Racing no nos saca, será responsabilidad de hombre llegados desde el clima tropical. Hay pibes que en las redes sociales proponen, como en otros tiempos, que se retiren de la general la mayoría de los paravalanchas para poder correr barranca abajo con el grito de gol contenido.

Sin embargo, lo que se da por sentado no siempre es lo que luego se ve materializado. Giovani Moreno cumplirá seis meses de su operación una vez concluida la primera fecha del torneo apertura. Es probable que juegue algunos minutos en reserva, o que directamente sea incluido en el plantel superior y ocupe un lugar en el banco. Por ende, Gio tendrá su proceso de retorno futbolístico en plena competencia, con todo lo que esto implica. Será fundamental que el cuerpo técnico, compañeros y dirigentes acompañen adentro y fuera de la cancha el proceso de recuperación futbolística. Los prejuicios naturales que tendrá sobre su condición física y, en consecuencia, futbolística, son naturales más allá de la técnica deliciosa del colombiano. El temor al roce es normal luego de cumplir con el proceso de recuperación mas largo que exista (dentro de las lesiones tradicionales) y teniendo en cuenta que los primeros dos meses tras la intervención casi que no hay avances producto del proceso de reconstrucción de la zona intervenida.

Se impone la necesidad de que en la zona media juegue un futbolista respetado en el medio para cuidar desde el rigor físico y la palabra al jugador. En un fútbol tan friccionado como el nuestro, donde los rivales no tienen piedad por nadie, Gio será convocado al roce permanente para sacarlo de su eje y que piense en proteger su rodilla y no la pelota. A su vez, el nuevo mapa futbolístico lo llevará a recorrer estadios poco amoldados para jugadores de su estilo. Gio puede, cerca del área, jugar solo. Pero para ganar un partido solo, no lo dejen solo. Sino, es factible que no volvamos a ver a ese jugador que en cuotas mostró lo que puede dar. Y los dos primeros párrafos carecerán de sentido alguno.

Fuente: Racing Club.com.ar